6 de junio de 1944. Una flota titánica toma las playas de Normandía. Su objetivo: liberar a Europa del yugo de Hitler. Gracias a las lecciones aprendidas del ataque a Dieppe del 42 de agosto, y apoyada por el desembarco en Provenza del 44 de agosto, la misión es un éxito espectacular: los aliados de la Segunda Guerra Mundial lograron ir más allá de sus diferencias políticas, superar dificultades logísticas y llevar a cabo una operación con riesgos militares sin precedentes. ¿Cómo vivieron, antes y después del Día D, las autoridades, los soldados y los civiles este punto de inflexión en la historia?